Por: Anyela Patricia Cardozo. Facilitadora proyecto MIA en Caquetá.

Las mujeres en proceso de reincorporación y la comunidad se han encontrado en un mismo escenario de formación que les ha permitido comprender de manera significativa su realidad rural, gracias al proyecto MIA del Fondo Europeo para la Paz.

Miravalle es una vereda ubicada en el municipio de San Vicente del Caguán, que hace parte de la zona de reserva campesina de la región del Pato y Valle de Balsillas. Este sector se ha caracterizado por ser un territorio donde se ha vivido el conflicto económico, político y social por varios años. La comunidad rural se vio afectada por este fenómeno. No obstante, la historia de este territorio ha venido cambiando a raíz de la firma del Acuerdo de Paz: el proceso ha generado espacios de integración y desarrollo local del territorio.

Gracias a la firma del Acuerdo de Paz, varios países del mundo han hecho su aporte para el desarrollo local de los territorios en el país. Uno de los mayores aliados para la implementación del Acuerdo ha sido La Unión Europea, que ha ratificado su compromiso incondicional para aportar a la sostenibilidad de este proceso. En este proyecto, eso es posible a través de Acción Cultural Popular – ACPO, cuya trayectoria ha sido un ejemplo de desarrollo social en los lugares más apartados del país.

San Vicente del Caguán no es la excepción, por eso ha contado con el apoyo de la Diócesis de San Vicente, que ha mantenido su compromiso por un territorio que ha sido estigmatizado, prestándose a mediar en las acciones que conduzcan a la construcción de la paz.

El proyecto MIA ha logrado fortalecer el tejido social y aportar al desarrollo del enfoque de género en la medida en que, a través de la formación de Escuelas Digitales Campesinas, las mujeres en proceso de reincorporación y de la comunidad se han encontrado en un mismo escenario de formación, lo que les ha permitido comprender de manera significativa su realidad rural y la forma como la resignifican a través de sus proyectos de vida, así como con el desarrollo de capacidades y habilidades que les han brindado un mayor nivel de conocimiento y empoderamiento.

Por esto, las mujeres hoy se integran y se evidencia su compromiso para dar continuidad al desarrollo del territorio desde una perspectiva con enfoque de género.

El proyecto MIA “Mujer Mestiza, Indígena y Afrodescendiente”, proyecto de Desarrollo para la Mujer en proceso de Reincorporación,  es financiado por el Fondo Europeo para la Paz de la Unión Europea e implementado por Acción Cultural Popular – ACPO, la Diócesis de San Vicente del Caguán y la Registraduría Nacional del Estado Civil.MIA está destinado para mujeres que han dicho ‘no’ a la guerra, y hoy desean trabajar por el bienestar de sus familias y  comunidades; pero también, para mujeres campesinas y medios de comunicación comunitarios que fueron afectados fuertemente por el conflicto armado en Colombia.

Sobre el Fondo Europeo para la Paz

Es un mecanismo de cooperación de la Unión Europea, que tiene entre sus objetivos apoyar a Colombia en el desarrollo rural integral de las zonas más afectadas por el conflicto y apoyar la reincorporación social y económica de las víctimas y de excombatientes, en el marco de la implementación del Acuerdo de Paz. Fue creado en diciembre de 2016 y cuenta con 127 millones de euros para apoyar proyectos de Paz en 26 departamentos y 98 municipios de Colombia (de los cuales 51 municipios son PDET y 16 municipios hacen parte de las Zonas Futuro o Zonas Estratégicas de Intervención Integral, ZEII).